¿Todos tienen un alma en ellos?

Todos, ya sean peces, plantas, insectos, reptiles, aves, animales o humanos, son un alma. No tienen alma. Son almas en diferentes cuerpos. Solo en la forma humana de vida puede el alma comprender a Dios y desarrollar nuestro amor perdido por Él.

Prueba científica de reencarnación

Nunca hubo un momento en que yo no existiera, ni tú, ni todos estos reyes; ni en el futuro ninguno de nosotros dejará de serlo. —Bg 2.12

A medida que el alma encarnada pasa continuamente, en este cuerpo, desde la infancia hasta la juventud y la vejez, el alma pasa de manera similar a otro cuerpo al morir. Una persona sobria no está desconcertada por tal cambio. —Bg 2.13

Para el alma no hay nacimiento ni muerte en ningún momento. Él no ha venido a ser, no nace y no vendrá a existir. Es no nacido, eterno, siempre existente y primitivo. No es asesinado cuando el cuerpo es asesinado. (Bg 2.20)

Oh Partha, ¿cómo puede una persona que sabe que el alma es indestructible, eterna, no nacida e inmutable matar a alguien o causar que alguien mate? —Bg 2.21

Cuando una persona se pone prendas nuevas, abandona las viejas, el alma acepta de manera similar nuevos cuerpos materiales, abandonando los viejos e inútiles. (Bg 2.22)

La felicidad es un derecho de nacimiento de todos. El alma que tenemos es en forma de dicha, es una entidad eterna con un poder inherente de conocimiento y percepción (Sat-Chit-Ananda).

Esta es la razón por la cual cada criatura viviente se ve feliz casi todas las veces, excepto las amenazas que ponen en peligro la vida misma.

No obstante, los seres humanos que han desarrollado su ego tienen más momentos infelices que otros seres que tienen un ego normal de existencia.

Dentro de los seres humanos también vemos que el nivel de felicidad está en una proporción inversa al nivel de ego.

Una persona con un ego cada vez más alto quiere que todo y todos funcionen según sus propios deseos y, por lo tanto, perjudica el sistema de la naturaleza y el ego de los que lo rodean. Esto genera fricciones y choques internos, intrínsecos y también externos; que lleva a la infelicidad

Toda criatura viviente, ya sea visible o invisible, definitivamente tiene un alma en ellos. Es por el alma que podemos sentir el dolor en este cuerpo.

Para saber más, mira mi otra respuesta: la respuesta de Avani Dedhia a ¿Cuál es el tamaño del alma? ¿Es lo mismo para todos los seres vivos independientemente de su tamaño físico?