Sí, uno puede seguir siendo feliz incluso en las peores situaciones, aunque no es fácil, si hay un fuerte poder de voluntad y una determinación firme. En realidad, la vida nunca es fácil para nadie. Es la montaña rusa de altibajos. Ahora la felicidad y la tristeza, todo depende de nuestro proceso de pensamiento. Para algunas personas, incluso un asunto pequeño puede desencadenar mucha tensión, mientras que otras pueden no verse afectadas por problemas graves. Todos tienen diferentes reacciones ante la misma situación.
Pero si uno está atrapado en tales circunstancias que sentimos que todas las cosas van mal, primero démosle la aceptación a lo que es inevitable. La aceptación de lo que está sucediendo a medias resuelve los problemas. Luego comience a hacer afirmaciones positivas antes de irse a dormir y antes de levantarse de la cama. Las afirmaciones deben hacerse sin usar palabras como espero, nada, nunca. Las afirmaciones deben llevar la convicción de que todo va a estar bien y en orden. Esta es la ley de la atracción que atrae la energía según nuestro proceso de pensamiento. Entonces, la idea de ese poder supremo siempre decide lo que sea bueno para nosotros y, finalmente, trae paz y felicidad a nuestras mentes. Todo este proceso es lento pero realmente efectivo, así que pruébalo. La mejor de las suertes, sigue siendo bendecido