En mi opinión, el diseño de interacción y el diseño de la experiencia del usuario serán aún más relevantes en el futuro.
- La IA estará más integrada en nuestras vidas. Imagine que no solo tendrá un teléfono inteligente, sino también un hogar inteligente, un automóvil inteligente, un robot inteligente, un refrigerador inteligente, un televisor inteligente … ¿Cómo se comunicarían estos dispositivos con usted y entre sí? ¿Cómo puede su “inteligencia” ayudarlo a ser más saludable, más seguro y más productivo? Ahí es donde entran los diseñadores, tomando decisiones de diseño sobre cómo usted, el humano, interactuaría con la (s) máquina (s) y sistema (s).
- La atención médica, los servicios públicos y otras agencias gubernamentales se pondrán al día. Rellenar cheques en sobres o hacer un viaje al DMV ya no existirá. La sociedad desarrollará la necesidad de mejores experiencias. Los servicios públicos tendrán que mejorar sus servicios mediante la adopción de una mejor tecnología y sistemas más inteligentes. Ahí es donde entramos nosotros los diseñadores, creando una experiencia fluida, fácil y eficiente para que pagues facturas, renueves tu licencia, etc.
Esos son solo dos ejemplos. Mi punto es que el diseño de interacción es un término muy amplio, que puede aplicarse en cualquier industria u organización. Es muy poco probable que sea irrelevante.