Hablando como un neoyorquino que nunca se cansa de caminar en High Line, creo que High Line atrae a muchas personas porque combina muchos elementos que hacen que las personas se sientan felices:
- Se siente como si estuvieras en un secreto o que hayas descubierto un lugar oculto : en gran parte no es visible desde la calle, se parece a un viejo paso elevado de ferrocarril oscuro, pero cuando subes las escaleras, es un mágico encantador espacio. La vegetación exuberante deliberadamente entrelazada con la arquitectura moderna hace que se sienta como una tierra oculta.
- Aventura, sorpresa e inesperado : nada tiene sentido, pero juntos, todo funciona. Las tumbonas de gran tamaño brotan del suelo, el pavimento se convierte abruptamente en flores silvestres y vuelve al pavimento, rota esculturas contemporáneas y arte caprichoso, edificios ultramodernos sin líneas rectas entre los viejos almacenes de empacadoras de carne, etc.
- Una perspectiva diferente : hay pocos o ningún otro lugar en Nueva York donde pueda estar al aire libre y muy por encima de la calle durante una distancia prolongada, por ejemplo, algunos tejados tienen excelentes vistas, pero High Line le permite viajar a través de más de 20 cuadras de la ciudad, cortando múltiples edificios, con el agua a un lado y algunos de los mejores paisajes urbanos del mundo al otro lado.
- Nos recuerda que las cosas pueden cambiar para mejor : no hace mucho tiempo, High Line era un ferrocarril abandonado y ese vecindario no era muy deseable. Ahora es uno de los lugares más bellos de Nueva York, y el área se ha convertido en un importante centro cultural. Creo que el arco de la historia resuena con muchos neoyorquinos.