El mercado libre es excelente en la asignación de recursos. Los hogares con sistemas ineficientes tienen costosas facturas de energía, y cuando este costo sea lo suficientemente alto, será cada vez más económico adaptar sistemas más eficientes. Por ejemplo, cuando el costo de los paneles solares es lo suficientemente bajo, los propietarios los instalarán, y no antes. Bueno, quizás un poco antes. Las personas están dispuestas a pagar una pequeña prima por un sistema eficiente de energía. Lo que no quieren es grandes hallazgos / impuestos / tarifas para continuar usando la energía de la manera actual. Por ejemplo, los medidores eléctricos “inteligentes” que solo penalizan a los usuarios y no los recompensan no serán bienvenidos.
Entonces, lo que estamos haciendo, principalmente, es comprar sistemas más eficientes a medida que se vuelve práctico. Dichos sistemas incluyen ventanas y puertas, paredes, espacios bajos y aislamiento de áticos, ventilación, electrodomésticos de bajo consumo, horno, aire acondicionado, bombas de calor, calentadores de agua, iluminación y electrónica.