Todo viaje comienza con un solo paso.
El primer paso sería una gran pila de requisitos comerciales, que finalmente se descomponen en una arquitectura, e incluso más tarde, en la implementación. La mayoría de los sistemas de software son jerárquicos, donde un módulo se puede dividir en submódulos, etc. Eventualmente, alcanza el nivel de tareas (o características) que un desarrollador puede hacer en unos pocos días o semanas. Esto funciona tanto si el equipo es uno, cinco o cincuenta (aunque, por supuesto, entran en juego otros problemas de escala, como dividir a cincuenta desarrolladores en equipos y tener la estructura de coordinación, comunicación y gestión correcta, etc.) dinero, muebles, tomas de corriente, estacionamientos, baños y ascensores!)
Entonces los sistemas tienden a acumular nuevas características; no siempre de una manera bien pensada. Pero comienzan de a poco y crecen, o comienzan a organizarse. En el último caso, cuando comienzas con un plan para un sistema grande, no es muy diferente de cómo se construye un rascacielos o un crucero. Eventualmente puede tomar miles de trabajadores y varios años.