Gracias por el A2A. 🙂
No, no te enfocas en la respiración todo el tiempo. Eso es algo que haces solo inicialmente, cuando te sientas y relajas tu cuerpo. En ese momento, también te enfocas en la respiración deslizándose fácilmente dentro y fuera del cuerpo durante algunas respiraciones profundas. Esto sirve para ralentizar el proceso de pensamiento. Los dos procesos están conectados exactamente de la misma manera que cuando estornudas, cierras los ojos. Es una conexión automática. Disminuya la respiración como una entrada inicial a la meditación.
Continuar enfocándose en la respiración es mantener su enfoque en la respiración, en lugar de permitir que el enfoque se difunda en la etapa expansiva de una presencia más profunda. No traigas tu mente de vuelta al momento presente. ¿Cómo define el momento presente? Luego debes incorporar la mente cognitiva para hacerlo. Eso sería traer conciencia a la mente conceptual una y otra vez.
En una mente más profunda, estás más allá del tiempo y todo está ahora. En una mente más profunda, no hay otro que este momento aquí ahora. No hay otro lugar que aquí. La mente no es otro lugar, y luego aquí. En todos los momentos de meditación, no hay otro lugar a donde ir sino un sentido más expansivo de aquí. No puedes escapar de este momento presente, la verdad sea conocida.
- ¿Es malo meditar sabiamente religioso?
- ¿Por qué es beneficiosa la meditación?
- ¿Cómo puede ayudarte la meditación?
- ¿Qué sucede cuando traes meditación a las escuelas públicas?
- Cómo hacer meditación adecuadamente
A decir verdad, su enfoque naturalmente gravita hacia una mente más profunda. Un aspecto de esto ya está dentro de sus aspectos más profundos.
Es nuestro pensamiento de separación y distancia entre lo que experimentamos, no ninguna realidad de separación. Estás EN UNA mente más profunda ahora.
En realidad, es más difícil mantenerlo en el ámbito del pensamiento. Es nuestra creencia en la dificultad que más “luchamos”. Cuando surgen los pensamientos, son meramente las mejores nieblas energéticas. Te das cuenta de la niebla y tu presencia ya se extiende más allá.
Eventualmente cierras los ojos y el foco y la profundidad se atraen entre sí como un poderoso imán para planchar.
Más que cualquier otra cosa, la meditación es PERMITIR lo que ahora ES una verdad siempre presente. Tu presencia en una mente más profunda es mucho más poderosa que la de los pensamientos que aplastan como moscas. No te preocupes por eso.
Namaste